Que no me quieras
hasta en momentos
de comprension alta
podria llegar a aceptarlo
pero que el azar nos traiga drogadictos
a sentarse a nuestro lado
cuando estamos solos flashando
es algo que me da derecho a quejarme
ante lo mas sagrado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)

No hay comentarios:
Publicar un comentario